Campeonato de Madrid de Veteran@s

El frío día parecía unirse a nuestros temores. Últimamente las lesiones se habían extendido por el grupo. Campo base en la colchoneta azul y desparramo de mochilas.

¿Dónde está mi número? pregunta Almudena. Con los nervios las zapatillas se mezclan. ¡¡Correr  que empezamos!!  Y encima tenemos dos pruebas a la vez.

Almudena lucha contra la altura del listón, su metro y medio no le ayuda... otra vez será. El coraje la hace pasar la prueba del peso con una plata. Y su revancha llega en el 60 ml. Ella sola contra 3 linces. Su velocidad la lleva al oro y lejos de sus depredadoras.

Puri se lleva plata en peso en lucha fratricida con Trini, que ha usado su método baloncestista consiguiendo el bronce. Con sus largas piernas consigue oro en altura y plata en longitud. Eso sí yendo de una prueba a otra como una posesa.

Trini quiere testar sus piernas machacadas por la marcha y tras un carrerón deja a sus rivales estupefactas. Oro en 200 ml. En el podio evita contestar a comentarios hijos de la frustración. Remata con otro oro en el 60 ml. 

Azucena hace lo que puede. Su cadera le hace recordar que aún no tiene el alta deportiva. Oro en altura más por casualidad y empeño que por resultados y oro en peso con el número de la bestia 6,66. Al ser la segunda vez que consigue esta marca pregunta si no estaría bien acudir a las competiciones con una ristra de ajos.

José Luis viene con experiencias anteriores clavadas en los gemelos. Pero hoy va a ser su gran día. Oro en 200 ml y oro en el 60 ml. No sabemos con qué foto quedarnos si la de su alegría al acabar el 200 o la cara de velocidad que ponía, de verdadero Ferrari, en el 60.

Ya sabemos por qué Mariano no consiguió medalla, aunque sí marca personal, que casi es más importante, no se puede leer el periódico en los calentamientos de las pruebas. Y menos el Marca que es de fútbol.

Jesús, que decir de Jesús si previamente no hemos estornudado. Al grano, después de ir tirando él solo, continuamente, sin desfallecer un segundo, en los 800 ml,  nadie pudo pasarle y arrebatarle su oro, y eso que había verdaderos "gacelones" pisándole los talones. Como él decía "mi primer podio"...y bien dorado. 

Carmen siempre lucha contra las pruebas y contra sí misma. Es su destino. Y su valor. Valor para hacer vallas y conseguir bronce. Valor contra el listón horizontal con una plata. Y valor y resignación porque tu propia compañera te saca 5 centésimas en la línea de meta del 800 y te deja con el bronce. 

Mónica, ¡Ay Mónica! aunque poco a poco  va creciendo en su transformación  depredadora, todavía la pierde la genética ardillil. "la paso o no la paso, la paso..." y mientras, la tercera en discordia las pasa a ambas, dejándola con la plata en el 800. 

Clarisa lo tiene claro. Se viene a competir...pero con cuidado no me lesione y no pueda ir a Budapest. Es de las pocas que hace el gesto para la foto. Pero no solo la estética la sale bien. Sus resultados la llevan al oro en peso, plata en vallas y plata en triple salto. Y todavía tiene fuerzas para pelear con los jueces por la altura de listón de sus compañeras. Galones. 

En fin, veinte medallas que saben a gloria y que hacen que se nos empiece a mirar con respeto por las pistas de atletismo. Y en las de baile también. 

Azucena